[Cinema] El gran diálogo de Eat, Pray, Love

"- Es pizza Margherita en Nápoles, es inmoral no comerla.

- Quiero comerla, pero ya subí 5 kilos. Tengo un... aquí en la panza, ¿Cómo se llama? ¿Cuál es la palabra?

- Un rollito... Déjame preguntarte algo, en todos los años que te has desvestido enfrente de hombres...

- ...No han sido tantos.. -interrumpe.

- Está bien... ¿Alguno te ha pedido que te vayas? ¿Se ha salido?

- No...

- Porque no le importa. Está con una chica desnuda, se ganó la lotería. Estoy tan cansada de decir que no y despertar en la mañana y recordar todo lo que comí, contar todas las calorías para saber cuánto odiarme en la ducha. Me voy a lanzar. No quiero ser obesa, pero me harté de la culpabilidad. Esto es lo que voy a hacer: me voy a acabar la pizza, luego vamos a ver el fútbol, y mañana vamos a salir y nos vamos a comprar unos pantalones más grandes." 

En mi vida he dicho demasiadas veces que no me gustan las comedias románticas, quizás porque el trasfondo casi siempre es el mismo. Sin embargo a veces tienen diálogos y momentos de lucidez que en verdad me marcan sin quererlo, sin siquiera gustarme lo que veo. Eso fue lo que me pasó con Todas las canciones hablan de mí, la película que una vez les comenté, y que ahora vuelve a mí cada vez que no me atrevo a hacer algo... entonces me repito que en cada día debería constituirse al menos una infidelidad esencial. Y me atrevo a romper con mis esquemas.

Algo parecido me pasó con Eat, pray, love. Tal vez la hubiera olvidado para siempre si no hubiese aparecido este diálogo de arriba, que un buen día dejé guardado en las notas de facebook y que hoy traslado para acá (una mejor casa).

Como mujer vivo acomplejada por mi propio cuerpo, por las cosas que como o no como, por el ejercicio que hago o no hago, por el pelo que sale y no sale. Y si bien creo que en verdad ser guapa es un gran don para llegar a la gente, no es el único. No creo aún que el mundo sea lo suficientemente superficial para menospreciar la simpatía, o el talento, o las diversas características positivas de todas las personas que vivimos en la media. Así que basta de odiarse a sí mismo por no cumplir con un estereotipo, pues he aprendido a descubrir que antes que cumplir con eso, debo cumplir con lo que sé hacer, debo destacar en lo que hago. Las modelos ya podrán brillar en las pasarelas, yo tengo otro universo en el cual brillar como una estrella :)

Y sí, soy mujer y puedo intentar verme lo mejor posible todos los días, pero dentro de lo que puedo... y sin acomplejarse, porque con complejos no hay sonrisas, y díganme si no se ven hermosas las mujeres felices y seguras de sí mismas... 

Chau! c: